Los puristas dirán que el reggaetón, el dembow y el trap ‘no son realmente música’. Pero, ¿quién dice que todo tiene que ser tan serio, perfecto y recto? Existen miles de enfoques para ver el mundo y lo más interesante es poder verlas a través de los ojos de otra persona. La música, como cualquier expresión artística, nos hace enfrentarnos a esas realidades, pintadas por artistas que tuvieron vidas completamente distintas a la nuestra, tal y como lo hace Tokischa Peralta en cada una de sus canciones.
‘Iconoclasta, llamativa, atrevida, honesta y explícita’ son palabras con las que muchos describen a la cantante dominicana. Pero de una u otra manera, a ella no le importa lo que digan de ella, sino lo que ella misma tiene que decir y expresar. Desde su primer tema, Pícala junto a Tivi Gunz en el 2018, vemos su personalidad, su imagen y que no le tiene miedo a nada, lo que la ha llevado a colaborar con artistas como Madonna, Rosalía, Marshmello y muchos otros de talla internacional.
De la mano de su disquera, Paulus Music, Tokischa encontró su propia voz y estilo único que tan solo al escuchar un solo sonido de alguno de sus tracks sabemos que es de ella, no hace falta ninguna introducción o sello. Su forma de cantar y rapear se siente fresca y natural, no está buscando ser nadie más, sólo ella. Al igual que su ritmo y la producción, representan una mezcla de dembow, reguetón y trap, haciendo ver sus raíces en las calles de República Dominicana.
Sus letras son explícitas, nos gritan en la cara y nos dicen qué es lo que debemos escuchar, así no queramos. Muchas veces son tomadas como chiste y quizás esa sea la idea detrás de cada una de esas líneas. Sin embargo, en sus entrevistas, Peralta menciona que ella escribe desde lo que conoce, su experiencia y una realidad marginalizada que casi no se ve en el mundo mainstream. Se inspira en la vida que tuvo a partir de sus 18 años cuando hizo trabajos sexuales en RD y menciona detalles de cuando tuvo una relación con un hombre que escapaba la ley en Delincuente con Anuel AA y Ñengo Flow, otro de sus temas más populares.
No ha sido necesario que estrene un disco o una producción con múltiples canciones porque, tal y como pasó con Nicki Minaj en sus inicios, sus colaboraciones o sencillos han sido más importantes para captar la atención de millones. Linda de 2021 con Rosalía fue la composición que nos hizo conocerla a nivel internacional, dándole la exposición a la industria musical y logrando nominaciones. Otras como Chulo pt. 2 con Bad Gyal y Young Miko, Dorito & Coca-Cola con Danny Ocean y Perra con J Balvin representan el alcance que puede tener su imagen y tracks para poder viralizar o expandirse.
Cuando escuchamos ‘popola’, sabemos quién es. Ningún otro artista suena igual a ella y eso es lo más importante en un momento en el que muchos quieren sonar igual para captar la atención en redes sociales. Esa ‘autenticidas’ —tal y como lo mencionan en todos lados— es la que la hace destacar entre el resto, lo que ha hecho que tanto destaque, es la evidencia de qué es lo que de verdad quiere el público, esa necesidad de ver la realidad y de salir de lo que es demasiado manufacturado o ‘perfecto’ como una foto de una Kardashian o la portada de alguna revista.
Tokischa representa una nueva manera de mostrarse al mundo, una en la que no importa qué tan imperfecto eres, cuál es tu pasado o lo que te avergüenza de ti mismo, y que lo que más importa es hacia dónde vas y lo que tienes que decirnos. Porque, ¿con tanta perfección, con quién vas a conectar? Sus canciones nos hablan de amor, sexo, poder y, sobre todo, de que no hay nada más importante en esta vida que divertirse, porque no hay otra vida, ni otro tú, ni otro yo, solo el ahora.
Si quieres empezar a escuchar a Toki para el CUSICA FEST 2023, deberías darle play a esta lista de reproducción: