Death Pill acaba de lanzar su sencillo más pegajoso hasta la fecha, titulado Phone Call. Este tema forma parte de su próximo segundo álbum, Sologamy, que será lanzado en junio.
La banda describe esta canción como una ‘verdadera historia triste de amor, cuando nadie te devuelve la llamada’. Según explican: ‘cuando estás esperando una llamada de alguien que te importa, el tiempo empieza a arrastrarse’. Cada minuto parece una hora, cada momento se siente como una eternidad y cada sonido del teléfono hace que tu corazón se detenga.
La banda comparte que ‘revisas varias veces el teléfono, aunque sabes que está en modo silencio. Los pensamientos llenan tu mente: ‘¿Y si se olvidó?’, ‘¿Y si no quiere hablar?’, ‘¿Y si tiene a otra persona?’. Estas dudas y miedos se convierten en un juego mental donde uno mismo se vuelve su crítico más duro.
La agonía de esperar puede ser abrumadora, afectando incluso la vida cotidiana: no puedes concentrarte en el trabajo, te distraes al hablar con amigos e incluso los placeres simples parecen menos importantes. Los pensamientos sobre la llamada se vuelven molestos, como una mosca que no deja en paz.
Cada vez que vibra o se ilumina la pantalla del teléfono, esperas ver su nombre, pero la decepción llega una y otra vez. Esperar una llamada es un estado emocional frágil que toca las partes más profundas del alma. Requiere paciencia y humildad, pero también nos enseña a valorar los momentos en los que finalmente sucede la conexión. Cuando finalmente suena esa llamada tan esperada, todo el sufrimiento parece valer la pena, aunque solo sea por un instante. Ese momento puede ser tan dulce que olvida toda la agonía previa.
Esperar una llamada no es solo una montaña rusa emocional; es un reflejo de la vulnerabilidad y deseo de ser comprendidos. Es el anhelo de ser necesario por alguien más. Con esta canción, Death Pill abre su corazón, esperando que otros también quieran compartir ese viaje emocional con ellos.