Manuel Carrasco ha compartido su más reciente tema titulado Fue, disponible en las plataformas musicales.

Uno de los grandes males de nuestros tiempos es, probablemente, la percepción que tenemos del propio tiempo. No es que vivir sea urgente: es que vivimos con urgencia.

Habitamos una época en la que la inmediatez hace que consumamos todo de manera compulsiva, que veamos y escuchemos las cosas a doble velocidad, que produzcamos de manera apremiante. Corre, hazlo ya, que se olvidan de ti, que viene alguien detrás, saca algo, lo que sea, publica, que te vean, corre. Hemos convertido así el presente en pasado haciendo imposible que las cosas puedan suceder de verdad porque si todo es ayer jamás podremos encontrarnos, porque si no nos paramos no sabremos nunca hacia dónde vamos.

Por todo esto uno de los requisitos imprescindibles de la creación es la paciencia. No se puede crear si no sabes esperar y si no sabes esperar tampoco sabrás cuidar. Este cuidado es el que Manuel Carrasco ha tenido para tallar su noveno álbum de estudio.

Esta canción es una declaración de desamor. Una canción sobre de todo lo que se desvanece y ya no regresa. Una canción sobre la íntima decepción. Una canción sobre lo compartido que se termina.

Fue es descalza, sin artificios, que empieza casi muda con el punteo de una guitarra que suena al principio, a antes de todo, quizás en Isla Cristina, quizás en un Manuel adolescente, todavía con esa ingenuidad siempre necesaria para convocar al amor, una guitarra y unas palmas y ya sabemos que las palmas son la manera que tiene nuestro interior de sonar y hacerse notar.