El domingo 7 de febrero, Abel Makkonen Tesfaye, el cantante de 30 años conocido como The Weeknd, le dio un giro a su carrera musical tras ser el encargado del show de medio tiempo del Super Bowl, el show más televisado de Estados Unidos, donde dió una presentación poco tradicional y con mucho concepto por detrás.

Para este esperado espectáculo, el artista inició su show con su hit del 2016, Starboy, con un escenario diseñado como la entrada de Las Vegas llena de luces LED, acompañado de un set de bailarines e instrumentistas vestidos con trajes brillantes y cascos parecidos a la banda Daft Punk, con quien colaboró para la canción I Can’t Feel My Face. Debido a que no habían espectadores en el campo, fue la primera vez que se construyó un escenario y se utilizó toda la arena para un medio tiempo.

En su repertorio estaban varias canciones de su último álbum After Hours, luego fue de The Hills a I Can’t Feel My Face y de ahí procedió a realizar una transición donde el sostenía la cámara y muchos bailarines vestidos igual que el pero con las caras vendadas caminaban desorientados alrededor de él. También presentó su hit del 2011, House Of Ballons, y con la orquesta de fondo, canto Earned It, su contribución para la película 50 Sombras de Grey, y terminó con su último hit, Blinding Lights, con una coreografía por toda la arena y con más de 100 bailarines.

Su vestuario fue inspirado en el traje que vistió el legendario Michael Jackson en su presentación del Super Bowl en 1993, con zapatos blanco y negro y una chaqueta roja color clave de su último disco, y en varias ocasiones hizo el famoso moonwalk del cantante difunto. Sus bailarines vestían igual a él, pero con la diferencia de las caras vendadas y unos tapabocas blancos.

El chico admitió que su presentación fue inspirada en el show que hizo Diana Ross en el show de medio tiempo de 1966. «Ella es demasiado glamorosa y su show me hace sonreir siempre, y además, tuvo una gran salida con ese helicóptero que aterrizaba en el medio del campo, agarrándolo y elevándose por las nubes… Ojalá hubiera podido hacer eso, u ojalá hubiera podido pensar en eso primero. Aunque creo que tampoco tengo mucho dinero para hacerlo!» exclamó acerca del proyecto que, según su publicista, la producción costó $7 millones.

Tesfaye ha pasado estos último años, no solo en la promoción de After Hours, sino también apoyando a las causas como Black Lives Matter en discursos como el que dió para los MTV Video Music Awards, en honor a Jacob Blake y Breonna Taylor, y la donación que hizo junto a Postmates de 150 comidas a restaurantes de Tampa que trabajan para los trabajadores del hospital AdventHealth Carrollwood.

«Veo que mucha gente esta pasando mucho trabajo y solo quiero ayudar. He estado en esa posición y sé cómo se siente. Nunca tuve dinero cuando era niño en verdad, aspi que darle a otros no es un problema para mi, al contrario, es bastante fácil» dijo Abel ante la prensa sobre la donación.

Disfruta de la presentación que dió The Weeknd en el Super Bowl de ayer a continuación: