Esta vez acompañado por la dulzura de los colombianos Monsieur Periné, el chileno Gepe se adentra con discreción en la intimidad de quien vive un momento complejo. Con una letra profunda que conecta desde el primer acorde.

En palabras de su autor, 21 DE ENERo habla de la adolescencia. De lo que se desprende de ese término: adolecer, doler, transformarse. Pasar de la niñez a la casi adultez en un puente eterno donde todo es muy intenso y pareciera que no hay un mañana ante los sentimientos más sencillos o los más complejos.

‘En lo que me inspiré es en la imagen de un adolescente que para poder sobrevolar esa transformación tan complicada y transitar por eso, además de tener ayuda de su familia y ayuda médica calificadísima, se aferró a los libros, a las películas, a las series, a dibujar, a armar un reflejo de sí mismo; como una bitácora para poder botar todas o gran parte de las energías ahí’.

‘Musicalmente tiene pocos elementos’, señala Gepe. ‘Porque justamente creo que la intensidad se puede subrayar de mejor manera con pocos instrumentos’.

‘Esta canción necesitaba de una voz femenina para completar el personaje que se perfila, que no se identifica ni con masculino ni lo femenino. Por lo tanto en la suma de los dos -entre Cata y yo- hay un personaje nuevo, hay un tercer personaje. Y bueno, en la parte musical, Santiago hizo un aporte súper bonito en la segunda parte de la canción con charangos e instrumentos latinoamericanos’, acota.

Acompañado de un visualizer dirigido por Simón Varea, 21 DE ENERo se suma así a los exitosos adelantos que Gepe ha revelado de su nuevo álbum. Ya se han dado a conocer los singles Paloma, playaplaya y VIVO, esta última junto a Rubén Albarrán de Café Tacuba.

De este modo, nutre una vez más una trayectoria que lo ha consolidado como una de las voces latinoamericanas más destacadas del último tiempo. Y se convierte en una figura clave en la proyección internacional de la música popular de su natal Chile.