La escena del death metal melódico ha sido sacudida por una noticia inesperada, la vocalista Alissa White-Gluz ha anunciado su salida de la banda sueca Arch Enemy.

Después de doce años al frente del grupo, la cantante recurrió a sus redes sociales para declarar de manera concisa que las partes han «separado caminos», sin ofrecer mayores detalles sobre las razones de la ruptura.

Sin embargo, Alissa aprovechó la oportunidad para expresar su profunda gratitud: ‘Estaré eternamente agradecida a los miles de fans increíbles que he conocido en el camino’, escribió White-Gluz.

La banda, por su parte, mantuvo la misma tónica de brevedad y profesionalismo ante la situación. En un comunicado conjunto, la agrupación expresó: ‘Estamos agradecidos por el tiempo y la música que hemos compartido y le deseamos todo lo mejor’.

Aunque el nombre de su reemplazo aún es una incógnita, la banda dejó un intrigante mensaje para sus seguidores: ‘Donde hay un final, también hay un comienzo’, sugiriendo que la búsqueda de una nueva voz para liderar su futuro ya está en curso.

Mientras el futuro de Arch Enemy permanece en el aire, Alissa White-Gluz ya ha dado el siguiente paso en su carrera en solitario. La vocalista desveló recientemente su nuevo sencillo, The Room Where She Died, una canción que, según sus propias palabras, le brinda una satisfacción creativa inmensa.

‘Se siente verdaderamente satisfactorio para mí; es como si pudiera expresarme de muchas maneras que han permanecido latentes durante años’, describió.

Además, Alissa White-Gluz confirmó que está trabajando activamente en un álbum en solitario completo. Lo describe como un trabajo «diverso» y no pudo ocultar su entusiasmo por compartirlo con el público.

‘¡No puedo esperar para compartir más con ustedes!’, comparte. Este nuevo capítulo promete explorar las múltiples facetas artísticas de una de las vocalistas más icónicas del metal contemporáneo.