Si eres fanático de asesinos en serie o del cine, sabrás que la nueva película de Tarantino, Once Upon a Time in Hollywood desarrolla múltiples historias, entre esas el asesinato de la actriz Sharon Tate a manos de miembros de La Familia Manson, que era una secta cuyo líder fue Charles Manson. Ese fue el hecho más relevante, mas no fue el único. Ellos están más relacionados por algo más concreto que un ataque de locura.

Muy pocos conocen que después de salir de prisión, Charlie, como solían llamarlo, decidió que quería volverse un músico famoso como Bob Dylan y para lograrlo, comenzó a hacerse un nombre en la comunidad de Hollywood por sus fiestas, por sus seguidoras (muchas menores de edad) y por su carisma, lo que atrajo a la hija de Angela Lansbury y al baterista de The Beach Boys, Dennis Wilson, quien se convirtió en uno de los amigos cercanos del jefe del culto.

Sus inicios en la música

Luego de haber pasado mayor parte de su vida haber estado ejecutando delitos como robos y hasta una que otra violación, se encontró con su nueva pasión: la música, estando en prisión. Allí Alvin “Creepy” Karpis, un miembro de una pandilla de la era de la depresión estadounidense, le enseñó el bello arte de tocar la guitarra, queriendo así destacar en componiendo e interpretando sus canciones. Sin embargo, eso se le hacía difícil, pues, según cuenta Neil Young, Manson era un buen improvisador y esas letras que cantaba se perdían, no volvían a aparecer.

Al salir de la cárcel, Charles se convirtió en el líder del culto al encontrarse con este nuevo mundo lleno de amor, paz y drogas en San Francisco de los años sesenta. Allí se topó con el folk que se convirtió en su sonido. Esa fue la oportunidad que estaba esperando para iniciar su carrera como músico y se acercaba poco a poco a la meta gracias a sus fieles seguidoras, quienes hicieron que conociera a Dennis Wilson (uno de los Beach Boys) al encontrarlo en una parada de autobuses, él las llevó hasta la casa de La Familia, donde se conocieron. 

La carrera musical fallida de Charles Manson - Cúsica Plus

Dennis Wilson
(Fuente: Mark Sullivan)

Dennis Wilson y compañía

Manson y Dennis se convirtieron en amigos rápidamente, tanto así que la secta comenzó a vivir en la casa del miembro de The Beach Boys y se convirtió en la persona que les daba el dinero para poder sobrevivir, pagándoles la comida, ropa y hasta tratamientos médicos. Esta relación hizo que Charlie pudiera experimentar con la música en conjunto con su séquito, practicando canciones improvisadas con el sonido de fondo de una guitarra al ritmo del folk. Además, le abrió el paso a que pudiera conocer a personas del medio como Terry Melcher, Phil Kaufman y Neil Young, quien pensaba que Manson solo necesitaba una banda para poder tener éxito.

Melcher era un prominente productor musical; Manson sabía eso y por eso deseaba manipularlo para lograr firmar un contrato musical con una disquera. La manera en la que lo intentó fue invitándolo al rancho Spahn, a donde se mudaron, para que lo escuchara presentarse con la familia. Sin embargo, el hijo de la actriz Doris Day solo lo hizo por ser cordial, pues no le agradó la interpretación. Con Phil Kaufman pudo realizar la grabación 14 temas en versión acústica que luego fueron transformados en su LP después.

Todo eso terminó cuando Wilson pudo grabar una versión de la canción Cease to Exist del líder de la secta y la transformó en Never Learn Not to Love que fue todo un fracaso y él se llevó todos los créditos de la composición del mismo. Después de eso, Manson le robó unos discos de oro y destruyó su Mercedes.

Helter Skelter y los asesinatos

Debido a estos fracasos en conseguir entrar en el mundo musical, Charles Manson decidió hacer algo al respecto. Pero para ello, no quería ensuciar sus manos, así que consiguió utilizar a sus seguidores, a quienes constantemente estaba drogando y manipulando, para que realizara sus fechorías y conseguir vengarse de quienes nunca creyeron en él.

Inventó la teoría del Helter Skelter, esta decía que The Beatles escondieron el mensaje de que se avecinaba una guerra racial y que la gente de color iba a terminar ganando si era liderada por un caucásico —en este caso, Manson—, lo cual debía iniciar solo si ellos comenzaban creando crímenes que generaran odio en la comunidad afroamericana y estos eran, nada más y nada menos, que asesinatos en los lugares donde los productores musicales habitaban. De esa manera, sucedieron los asesinatos de Sharon Tate en Cielo Drive —lugar en el que vivía Melcher hasta que le rentó la mansión a Roman Polanski— y la de la familia LaBianca —quienes estaban establecidos cerca del hogar pasajero de Kaufman—. 

Su único álbum

Charles Manson logró grabar junto a Phil Kaufman 14 canciones que se convirtieron en un disco cuando entró en prisión en 1970. Los dos estaban encarcelados, el primero por los hechos atroces y el segundo por poseer marihuana; hicieron un trato y el productor se quedó con todos los derechos de sus canciones. Este producto musical tuvo como título Lie: The Love and Terror Cult. Se realizaron 2000 copias del LP para ser vendidas de forma independiente, sin estar bajo ninguna disquera. Sin embargo, solo pudo vender 300 de ellas porque la mayoría fueron robados por los miembros del culto. Poco después, una empresa musical española llamada Movieplay decidió hacer una edición del disco.

El “legado” de Manson

A pesar de las horribles fechorías, el siniestro líder de la secta fue tomado como inspiración para múltiples artistas. Marilyn Manson usó el apellido de Charles para hacer un juego de palabras con el nombre de la famosa actriz de Hollywood, Monroe, y la banda Kasabian se titula de esa forma por el de Linda Kasabian, quien fue miembro de la familia y luego testificó en contra de la cabecilla del grupo. Además, Guns N’ Roses decidió hacer una versión de Look At Your Game, Girl, al igual que Devendra Banhart de Home Is Where You’re Happy. Trent Reznor de Nine Inch Nails también solía hablar de la fascinación que sentía hacia la mente maestra y los homicidios, tanto así que decidió utilizar la mansión de Cielo Drive, donde murió Tate cuando estaba embarazada, como estudio de grabación de The Downward Spiral hasta que habló con la hermana de la víctima y se dio cuenta de que estaba mal todo lo que estaba haciendo.

Estas personas, como muchas, se sintieron atraídas por un hombre cuyos sueños rotos lo llevaron a la perdición y a destruir otras vidas por un capricho. Es equívoco decir que tiene un legado porque en realidad no es así, a pesar de que a veces lo usen de referencia, así como Tarantino lo hizo en Once Upon a Time in Hollywood. Sus trastornos mentales y obsesión con lograr las cosas mediante la manipulación hizo que sus oportunidades se fueran por el retrete. Lo único que dejó fue el aprendizaje de que nada en esta vida es fácil y por más contactos que tengas, si no sabes desarrollar tu talento, no tienes nada.