El día de hoy falleció Aretha Franklin. No tiene sentido discutir su popularidad o su influencia en la música pop. Solo hace falta darse una vuelta por su listas de éxitos de Billboard, o la cantidad de artistas que le han rendido tributo en los últimos días. Pero Aretha es la clase de artista que además de tener un importante peso artístico fue una de las principales voces de la lucha por los derechos raciales en Estados Unidos y los derechos de la mujer.

En ese panorama Aretha Franklin no solo representaba una voz potente sino una figura orgullosa de su herencia y de feminidad, aún cuando está salía de los estándares normales de la sociedad de los años 60.

Pero si un tema encapsula toda la personalidad es de hecho un cover de un tema de Otis Redding, su extraordinaria versión de “RESPECT”. Para quién no ha escuchado la original y solo conoce la versión de Aretha volver a la interpretación de Redding es complicado, una exigencia al género femenino de respeto por traer el dinero a casa, que se convirtiera en la típica imagen de una ama de casa que pasa todo el día pensando en hacerle la cena . Sin embargo cuando el productor de Aretha sugirió que ella hiciera su propia versión la artista tomó en consideración su situación como mujer, ella después de todo ya era uno de los grandes iconos del mundo del pop y no tenía intención de esperar a nadie en casa para hacerle la cena.

Con un par de cambios en la letra, un arreglo de metales más potente y una exigencia bastante simple “Sock it to me” (dámelo) la artista hace al mismo tiempo un himno feminista y un tema que se volvería importante para la lucha por los derechos civiles. Aretha olió a la perfección el potencial de la canción y transformó en una pieza necesaria de la música pop y himno en la lucha de los derechos civiles

Franklin no le tuvo miedo a la puerta que abrió con su versión. La intérprete siempre habló abiertamente de sus posiciones políticas, y supo convertirse en una voz clave de las luchas contra el racismo y a favor de los derechos de la mujer, al punto que Marthin Luther King la consideraba una de las voces negras más importantes de su país.

Aretha supo el poder que tenía por su posición, supo lo que podía transmitir su impecable voz, supo ayudar a crear un cambio positivo. Aretha importa por cambiar el rol de las mujeres en la música popular, por convertir la su voz en un arma a favor de la integración racial y los derechos civiles.