Siguiendo por nuestro recorrido por discos extraños e interesantes del mundo del pop decidimos volver a Venezuela con uno de los primeros discos en asumir el lado más psicodélico y distorsionado del rock: ‘Ladies W.C.’ debut de la banda del mismo nombre.

Siempre que hablamos de rock venezolano del siglo XX parecemos soltar los mismos nombres, Vytas Brenner, Sentimiento Muerto, Zapato 3, Desorden Público o inclusive Los Impala.

Sin embargo son varios los grupos que se quedan por fuera de la conversación que cuando estudiamos la historia se dibujan como claves, uno de ellos: Ladies W.C. cuyo debut homónimo los pinta como héroes locales del blues rock y la psicodelia, aunque desaparecieron casi de inmediato.

Formado en 1968 por Adib Casta en la guitarra y coros, el norteamericano Stephen Scott en la voz principal, la armónica y el bajo; Mario Seijas batería y percusión y Jaime Seijas en la segunda guitarra el órgano y los coros. El grupo fue creado por Casta quién estaba en la búsqueda de crear un nuevo sonido en el país luego de su paso por la escena pop rock con los Claners.

El disco es muy llamativo en el contexto en que apareció. Mientras el resto de la escena apostaba los sonidos pop de los Impala o la improvisación psicodélica de Vytas Brenner Casta y compañía apostaban por un blues con toques de psicodelia que tenía más en común con la música de Eric Clapton o Jeff Beck que con lo que los rodeaba en el país. Letras en inglés, pedales de distorsión, largos solos de guitarra y pasajes instrumentales con todo el peso del blues sirven para mostrar un grupo extraordinariamente  talentoso en sus instrumentos.

Luego de una breve introducción utilizando el sonido de una poceta el disco abre con “People” tema lanzado como sencillo y que sirve como introducción a este sonido, con las guitarras directa y la carrasposa voz de Casta. Los siguientes tres temas “I Can’t See Straight”, “To Walk On Water” y “Heaven’s Coming Up” sirven como una suite de blues donde inclusive más que la guitarra brilla el trabajo de percusión y la armónica.

En otros momentos el grupo  deja lugar a la improvisación instrumental como en la funk “Searching For A Meeting Place” o  las instrumentales “Put That In Your Pipe And Smoke It” y “W.C. Blues” que sirven como piezas interesantes para desconectarse del caos citadino. Sin embargo el grupo no solo es velocidad y psicodelia el tema “The Time Of Hope Is Gone” muestra un lado melancólico que pudo ser interesante explorar en trabajos futuros.

Lamentablemente es el único lanzamiento de la banda. Luego de grabar el disco el bajista norteamericano volvió a su país lo que inició el proceso de separación de la banda, aunque sus miembros nunca se enemistaron no hubo una reunión real luego de la breve gira. Sin embargo en perspectiva el disco sirve como un interesante punto de partida para muchos de los sonidos del rock venezolano.

Está psicodelia con blues tiene mucho peso en el sonido de grupos como Zapato 3, Dermis Tatú, La Calle, y más recientemente grupos como Viniloversus o los finalistas del Festival Nuevas Bandas de este año Drosera Capensis cuyas versiones del stoner rock le deben el tener un espacio a Casta y compañía.