Es probable que tengas un recuerdo muy claro de la primera vez que te tropezaste con Gorillaz. Yo puedo ubicar a la perfección como hace unos 18 años en un paso de canales atrapé unos segundos de unas comiquitas en MTV que peleaban contra monos zombies en un cementerio en el video de “Clint Eastwood”. Para el momento, no había nada como ellos en la televisión o en la radio. No solo el grupo dejaba de un lado el culto de la personalidad apostando por dibujos animados, sino que su sonido era bastante peculiar. Una mezcla de pop, trip hop y rock alternativo que se mostraba desafiante ante el mundo del pop.

Nacido de la amistad entre el dibujante y diseñador, Jamie Hewlett y el vocalista de Blur, Damon Albarn el proyecto tiene la intención de satirizar la cultura de las estrellas pop. Esta idea mezclada con la carrera de Hewlett en historietas como ‘Tank Girl’ (1988 – 1995)  le dieron a la banda una historia interna absurda que incluye muertes, posesiones demoníacas, raperos fantasmas, y un vocalista sin ojos.

Teniendo el diseño y la voz de los personajes, Albarn procedió a pensar el tipo de música que haría con este proyecto y en definitiva no tener que usar su rostro lo liberó creativamente. Poco de lo que se consigue en la discografía de Gorillaz tiene algo que ver con lo que el músico venía haciendo con Blur. El grupo animado lanzaría su primer disco en el 2000 y lo que presentaría es una mezcla de hip hop, trip hop, electrónica y funk con apenas algunas pinceladas de Britpop saliendo de la voz de 2D que interpretado por Albarn parece un joven con problemas para lidiar con sus propias emociones.

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Tener una banda formada por caricaturas en un momento en el que MTV era aún una fuerza poderosa para la difusión musical terminó dándole a Gorillaz una identidad muy particular en la escena alternativa. La estética recuerda al trabajo previo del dibujante en ‘Tank Girl’ pero la fluidez de la animación y la extraña historia que ambos idearon para los personajes dieron una extraordinaria libertad creativa a los directores, trabajos como “Clint Eastwood” o “19-2000” sirven como una ideal carta de presentación mientras que trabajos como “El Mañana” o “Stylo” muestran una mejor animación y una entrada a la mitología interna del grupo.

Pero no se engañen por los llamativos videos de la banda, su música es el platillo principal. Cada uno de los cuatro discos de la agrupación, así como el experimento con el IPad que significó ‘The Fall’, muestra una faceta interesante del líder de Blur como compositor.


Además de los videos el grupo siempre ha podido presumir de una extraordinaria lista de colaboradores. Nombres tan variados como Paul Simonon de The Clash, Ibrahim Ferrer de Buena Vista Social Club, Lou Reed de Velvet, Snoop Dogg, De La Soul, su viejo rival Noel Gallagher de Oasis y un largo etcetera que convierte sus discos en listas de reproducción impredecibles que pueden saltar del Hip Hop al britpop pasando por el rock, la electrónica y el trip hop sin demasiadas preocupaciones.    

En esta mezcla el punto de encuentro son las preocupaciones de Albarn. Desde el segundo disco ‘Demon Days’ el líder de Blur ha aprovechado a estos personajes para hablar de los problemas que le preocupan del mundo real. Contaminación, corrupción, crueldad humana y un permanente miedo al apocalipsis subrayan la carrera de la banda. Esta paranoia, sin embargo, no hace que el artista no se divierta, hay una sensación de querer disfrutar antes del fin, muy lejano a como otros artistas ingleses como Radiohead enfrentan estos miedos.

Es complicado definir el legado de Gorillaz: Por un lado le dio a Damon Albarn una nueva 551ab1639606a6ad21c7959373f5bfb1imagen global luego de que el éxito de Blur en Gran Bretaña. Al mismo tiempo, tanto la idea de una banda virtual como el sonido del grupo dejaron una huella importante en la cultura pop; grupos animados como Dethklok le deben la vialidad de su concepto a Albarn, de la misma manera que las celebridades pop digitales que invaden Japón y Corea. Al mismo tiempo la combinación de géneros musicales fue un adelanto de lo que se venía en el mundo del pop alternativo, influenciando a bandas como Foster The People, Major Lazer, Tyler The Creator o Animal Collective.

Durante estos 20 años 2D, Murdoc, Russel y Noodles servido de excusa a Albarn para estudiar sonidos que salen de la estructura del pop y se han vuelto irónicamente en una parte inescapable de nuestra cultura pop. El mundo sería más pobre sin la combinación de los dibujos de Hewlett y la voz de Albarn, y nosotros, más tristes.