Kelly Osbourne, hija de uno de los mayores exponentes del heavy metal Ozzy Osbourne aseguró sufrir de la enfermedad de Lyme. Lo ha estado padeciendo durante una década, pero recientemente fue diagnosticado.

La patología fue transmitida a través de una garrapata que la picó y los síntomas van desde fuertes dolores musculares, fiebre, escalofríos y dolor de estómago; en una fase avanzada, puede afectar el habla y entumecimiento muscular.

En 2013 la artista se desmayó en el set de E! Fashion Police luego de sentir algunos de estos síntomas. Desde ese momento fue sometida a un tratamiento de medicina natural con células madres en Alemania, que han vitalizado su sistema inmune.

Kelly contrajo la enfermedad en el 2004, cuando su mamá llevó una gran cantidad de venados a casa para celebrar el cumpleaños 56 de su papá.

La cantante también aseguró que el primer diagnóstico fue de sufrir de epilepsia, donde estuvo medicada con un tratamiento errado, hasta descubrir hace 3 años la verdadera causa.